La Iglesia Anglicana de México, es una iglesia de tradición católica, pues tiene sucesión apostólica, sacramentos, los credos y las Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento.
Es una Provincia eclesiástica autónoma de la Comunión Anglicana Mundial, presente en México desde mediados del siglo XIX
La Iglesia Anglicana de México remonta sus raíces históricas desde dos vertientes originarias, una de habla inglesa (migración británica y estadounidense) y otra de habla castellana (mexicanos).
Vertiente anglófona
La llegada a México de numerosos ciudadanos británicos y estadounidenses que arribaron especialmente para trabajar en la minería y los ferrocarriles es una de las vertientes que confluyen en el origen de esta iglesia. Tras experimentar la exclusión religiosa del catolicismo romano, la reforma religiosa laicista de 1857 aseguró también a los extranjeros residentes no pertenecientes al rito latino la libertad de culto, separando a la Iglesia Católica Romana del estado mexicano. De esta manera, las familias anglófonas residentes en la capital organizaron la celebración de servicios en su idioma, por lo que, el 25 de diciembre de 1869, se celebró formalmente el primer culto anglicano en la Ciudad de México.
En 1882, la recién formada Christ Church (primera parroquia de la Iglesia de Inglaterra en México) entró en contacto formal con la más cercana Iglesia Episcopal en los Estados Unidos de América, la cual les brindó la dirección y la ayuda que buscaban. A partir de 1884 se organizaron diversas parroquias de habla inglesa en otras ciudades del país, hasta que, en 1904, todas ellas fueron agrupadas en el Distrito Misionero de México, posteriormente denominado oficialmente Diócesis de México y que abarcaría todo el territorio nacional. Los anglicanos mexicanos suelen destacar, con respecto a esta vertiente originaria de su iglesia, que la Diócesis de México fue establecida para atender a los feligreses anglicanos de habla inglesa que se encontraban totalmente aislados y desprovistos de cobertura pastoral y sacramental en el país, no para competir con otras iglesias.
Vertiente hispanohablante
La otra vertiente histórica de la Iglesia Anglicana de México se remonta también a las Leyes de Reforma y a la Constitución Política de 1857, efectivamente, al promulgarse tales normativas, un pequeño grupo de sacerdotes mexicanos pertenecientes a la Iglesia Católica Romana, posteriormente conocidos como los Padres Constitucionalistas, decidieron apoyar y defender públicamente dichas leyes, lo que causó su excomunión de la Iglesia Católica Romana y el posterior establecimiento de una iglesia mexicana independiente de la Curia romana. Su iglesia fue organizada oficialmente a partir de 1861, y en 1872 tomó el nombre de Iglesia de Jesús y posteriormente el de Iglesia Episcopal Mexicana y ahora Iglesia Anglicana de México.
Desde su establecimiento, la Iglesia Anglicana de México tomó contacto con la Iglesia Episcopal de Estados Unidos, hasta que, en 1875, tal relación fue formalizada. Esta estrecha relación y cooperación permitió a la iglesia mexicana, totalmente independiente, conocer la tradición anglicana, hasta decidir integrarse plenamente en ella. Así, en 1906, los sacerdotes y feligreses de la Iglesia Episcopal Mexicana fueron recibidos como parte integral del Distrito Misionero de México por el Rvdmo. Henry D. Aves, primer obispo de tal distrito. Desde entonces, la Iglesia Anglicana de México es mayoritariamente mexicana y de habla castellana.